
El balcón de los sueños,
esperanzas dormidas,
me ofreciste tus manos,
se quedaron vacías.
Generosa, mi alma,
hoy quedó rendida
y fluyen los arroyos
de lágrimas vertidas.
Te di mi vida entera,
mi eterna lozanía
y, sin darte cuenta,
me dejaste en la orilla.
esperanzas dormidas,
me ofreciste tus manos,
se quedaron vacías.
Generosa, mi alma,
hoy quedó rendida
y fluyen los arroyos
de lágrimas vertidas.
Te di mi vida entera,
mi eterna lozanía
y, sin darte cuenta,
me dejaste en la orilla.
2 comentarios:
¡¡que bonito!! No puedo decirte nada más, sabes cómo acertar en todos mis gustos. besos.
Cargada de tristeza. Me encanta. Esos arroyos de lágrimas vertidas...
Mi preferida. De momento.
Sombra profana
Publicar un comentario