28.5.09

Soneto para ti

Me iba acostumbrando a tu ausencia,
en mis agitados y monótonos días,
poco a poco pensé que te perdía
en dejadez total de mi demencia.

No entendí en tu faz esa clemencia
que a tu vez me suplicabas y pedías,
en mi nube yo pensé que no podía,
ignorando el final de tu paciencia.

A pesar de que este lecho me domina,
hoy me aferro al camino de la fuerza
arrancando por fin la vieja espina.

Mentalmente vigilo con destreza,
voy dejando con sigilo en cada esquina,
los rescoldos de una llama sin viveza.

18.5.09

Te necesito

Quiero cerrar mis ojos,
seguir oyendo esa melodía
percibiendo el olor a romero.

Quiero un baño de sol,
alejar de mi mente los recuerdos,
los malos recuerdos.

Pensar que estás a mi lado
como en aquellos años
de ternura, amor y ensueño.

Quiero tenerte como entonces
porque hoy te necesito,
te necesito y no te tengo.
.

14.5.09

Mis anhelos

Anhelo tener un día,
dedicarlo solo a mi,
disfrutar mis aficiones
como pintar o escribir.

Anhelo tener un día
y pasarlo junto a ti,
sentir en cada momento
que nuestro amor sigue ahí.

Anhelo tener un día,
a la montaña subir,
perderme por los senderos
y otro mundo descubrir.

Anhelo tener un día,
que el mal tuviera su fin,
y hacer de las cosas buenas
nuestra razón de existir.

9.5.09

Para vosotras dos

Soñé que, tras los cristales, os veía:
dos vueltas de llave, único abrazo,
torbellino de emociones
al unísono explotaron,
donde nacen las pestañas
y los ríos se desbordan.

En semiinconsciencia,
fieles guardianas presentía,
ojo avizor a mis movimientos.
En situaciones cruciales, sabemos,
la lejanía, nada que ver con el olvido,
eso no tiene precio.

Jamás sabréis el bien que recibí
quedando impreso en el libro de mi alma
con tapas de oro y letras de diamantes.
Hoy, desde mi pasivo rincón,
no me hundiré por vuestra marcha,
seré dichosa por vuestra presencia.

4.5.09

En busca de paz

Buscando el verde de los campos
me adentré por aquellos caminos,
a lo lejos el murmullo de las gentes,
de cerca el trinar de pajarillos.
Si hallarme quisieran, de nada serviría;
me alejé tanto buscando paz
que, en cierto momento, paré rendida.
Como la vida...
vas de prisa sin mirar atrás
y cuando quieres darte cuenta
la sombra de la guadaña
te hace reflexionar... y piensas:
despacio... despacio... tras la línea
imaginaria, está la eternidad.