22.3.11

A MEDIO CAMINO


Emprendimos un camino
y te cansaste,
aun la cima queda lejos
y paraste,
sobre mí aquella carga
abandonaste,
en crepúsculo rojizo
de una tarde.
La amargura y el dolor
que hoy me invade,
sin la fuerza ni el valor
para alcanzarte,
con las manos extendidas
me dejaste...
esperando que volvieras
a quedarte.
Ojalá tenga el coraje
de olvidarte,
como tú, que por tan poco,
me cambiaste.

16~2~2004