1.4.09

Playa del Albir

Cuánta belleza se pasea por
mis ojos, mis oidos, mis sentidos.
Admiro el mar en calma
divisando a lo lejos
dos motos acuáticas.

Pasan dos caballos
luciendo su estampa,
yendo por la orilla
de tan blancas aguas.

Moviendo sus clines
con gran elegancia,
y sus patas firmes
se hunden en la playa.

Se alejaron todos,
ya no queda nada,
solo melodías
dentro de mi alma.

Quiero seguir sola,
para que no pueda
interrunpirme nada.

Oigo pajarillos,
olas y esos grillos,
que tanto relajan.

Eso es lo que quiero,
no pensar en nada
y en el horizonte
perder la mirada.

De la gente y el mundo
no quiero saber nada,
esas injusticias
me dañan el alma.

Quiero estar aquí,
sin saber más nada,
y en el agua azul
perder mi mirada.

6 comentarios:

Calvarian dijo...

Buena forma de evadirse y no pensar en nada ni en nadie. Besix

Anónimo dijo...

A veces es bueno perder la mirada y ausentarse del mundo... pero luego hay que volver, vale? Un besito!

mardelibertad dijo...

Perder la mirada y estar en si mismo, buena manera de evadirse
Besos

Paqui dijo...

Hola, Calvarian: Seguro que tu lo has hecho alguna vez y lo sabes, para mi, oir el murmullo de las olas es como vivir sola en el mundo. Besos.

Paqui dijo...

Hola Diavolo: Ja,ja, pues si hay que vover a la realidad. El que no tenga esa portunidad no sabe lo que se pierde, aunque adentrarse por el campo tampoco está mal. toda la naturaleza es alimento para el alma. Besos.

Paqui dijo...

Mardelibertad: ¡Que voy a decirte a ti!
Mar de libertad, seguro que lo has hecho más de una vez y has sentido esa paz. Un beso.